Noche de felicidad.

Todo empieza con un fin, un final de película, Ratatouille, para ser más exactos. Comienza con una persona dormida en el sofá, medio apoyada en su cojín favorito, llegando la hora de acompañarla a la cama, sé que debo llevarla está profundamente dormida, en ese preciso instante de llevarla en brazos, me vienen a la cabeza recuerdos de mi niñez cuando yo era llevado de igual manera por mi padre, me ha llevado a recordar lo lejos que está ese momento y como ha cambiado, de como ese niño que duerme es ahora el padre despierto. De cómo aparece esa preocupación porque todo esté perfecto, de cómo llevar a mi hija a su cama y todo esté tranquilo.

Pero no acaba con esa subida a la cama, se le une el ver como su madre duerme con su hermanito en brazos, después de tener esos dos sentimientos de sentir el calor de mi hija y la visión de su madre junto a su hija, es cuándo me paro a pensar "creo que ya tengo la felicidad" "creo que superar esto va ser muy difícil", bajo a pensar en que hoy, tengo todo lo necesario, tengo casi todo lo que merezco, por lo que he vivido y luchado.

Tengo una familia.

P.D. recordar que todo tiene un comienzo, y ese comienzo es levantándome en la cama de mi hija siendo su cojín favorito ese mismo día por la mañana, me hace sentir que siempre he sido, soy y seré alguien muy especial en su vida, además de ser su papá.